Con la colaboración de ROSA MARÍA JIMENEZ JIMÉNEZ, amiga de la madre de nuestra compañera Sandra, a la cual agradecemos su colaboración; queremos acercaros una leyenda propia de nuestro entorno, Cabezas del Villar, que seguro os gustará conocer a través de esta entrada:
Cuenta la leyenda que
en una zona a las afueras del pueblo en
el pasaje Montelacasa hay unas cuevas donde el
Margañan se hace invisible solo se escucha el sonido del agua chocando
con las rocas.
Hace mucho, mucho tiempo un
grupo de árabes que pasaban por la
zona con sus caballos decidieron descansar un rato.
Al retomar su camino descubrieron una entrada hacia un lugar
desconocido. Con desconfianza se
introdujeron en la cueva,
cabalgaron unos kilómetros y pasadas
unas horas vieron una luz al final de la
cueva. Ellos decidieron salir por
allí. Habían llegado al castillo del Zurraquín, una torre grande junto unas
casas. En esa zona había agricultores trabajando en la cosecha. Los
agricultores guardaban las algarrobas, el centeno y el trigo en la habitación
cuya puerta daba acceso a la cueva.
Los árabes cargaron los sacos con la cosecha y
emprendieron la huida a través del pasadizo hacía las cuevas.
Al poco rato, los agricultores
descubrieron que la cosecha había desaparecido. Creían que era cosa de magia.
Nunca supieron donde
iba esa cosecha cada año...